Dicen que la pelota es esférica para que pueda rodar, de la misma manera que los ojos están para ver y las piernas para andar. Siguiendo la misma lógica podemos afirmar que la cabeza está hecha para pensar, sin embargo, existe un elevadísimo porcentaje de individuos que prefieren dejar su cabeza en casa o pasar de usarla. Cuando esto ocurre la vida roza casi lo absurdo.
La vida es una fuerza casi misteriosa que nos impulsa a hacer cosas que nos diferencian de los demás, nos saca del tedio y nos hace vibrar para alcanzar sueños casi imposibles; no hablamos de simples sueños, de un paseo bobo entre caprichos y banalidades, la vida no es un estar y dejar pasar, un puente entre un principio y un fin y, luego se acabó, vivir es actuar directamente sobre la existencia y para actuar en esta vida hay que estar motivado.
Los expertos en Psicología dicen que la motivación es lo que hace que un individuo actúe y se comporte de una determinada manera. ¿De qué sirve vivir una vida sin motivaciones, incentivos, ilusiones, expectativas, oportunidades, descubrimientos, avances, resultados? Woody Allen dijo en cierta ocasión “me interesa el futuro porque es el sitio donde voy a pasar el resto de mis días”. Sin motivación el ser humano es un “pringado”, una hoja de papel sin nada escrito. Cuando nada nos motiva surge el ahogamiento del alma. La motivación es, pues, base de cualquier desarrollo y de sus resultados.
La motivación es una combinación de procesos intelectuales, fisiológicos y psicológicos que decide, en una situación dada, con qué vigor se actúa y en qué dirección se encauza la energía. La motivación en las personas se inicia con la aparición de una serie de estímulos internos y externos que hacen sentir unas necesidades que cuando se concretan en un deseo específico, orientan la conducta del sujeto en la dirección hacia el logro de unos objetivos capaces de satisfacer las necesidades planteadas. La motivación hace, por tanto, que las cosas tengan significado y las personas adquieran profundos avances que conllevan al bienestar completo. A veces esto se logra partiendo de uno mismo y otras partiendo de otras personas.
Las personas motivadas son capaces de alcanzar cualquier objetivo que se planteen, por ejemplo, un reducido grupo de soldados bien motivados tendrán una fuerza adicional muy superior a cualquier gran ejercito desmotivado. Si juntamos eso a una excelente visión estratégica, una organización consecuente y una táctica y coordinación operativa eficaces, no habrá fuerza contraria capaz de doblegar ese conjunto de valores armonizados. La historia está llena de casos asi.
Hoy en dia la realidad empresarial dista mucho de esa armonia entre la cima, el medio y la base. Los empresarios suelen meter la pata a menudo y luego vienen las balances a la baja, por ello, algunas empresas empiezan ya a substituir el paternalismo anacrónico de antaño por incentivos actuales más motivadores, tales como los económicos, el respeto, la independencia y la calidad de vida. Cuidar esa calidad en los trabajadores termina siendo muy beneficioso para las empresas, aunque ello suponga cierta inversión que al principio puede parecer costosa. No obstante, si un trabajador se encuentra a gusto en el trabajo estará más motivado, rendirá más y los clientes estarán más contentos; el stress y el absentismo laborales son consecuencia de la ineptiud estratégica y táctica de muchos gerentes de empresa.
Pues bien hay países que poseen estas virtudes en alza, cuya sabia aplicación hace que destaquen frente a otros que no las poseen. De la misma manera también existen empresas que sobresalen del resto por su capacidad de motivar a sus empleados y aumentar asi su productividad, calidad y éxitos. En España, cuesta mucho ver a personas realmente motivadas, sobre todo en el mundo escolar y laboral, donde parece ser que, lo que más “motiva” a los responsables, es fastidiar a la gente en lugar de incentivarla. No hay justificación posible para eso, sin embargo, estos pésimos gerentes, “justifican” sus actitudes diciendo que la rivalidad, el mal rollo y la falta de reconocimiento, aumentan la competividad y productividad en el seno de la empresa. Falso!!! Eso es un descarado "mobbing". El creciente desarrollo y grandes beneficios de ciertas buenas empresas como, MRW (galardonada como Great Place to Work 2006/07), La Fageda, Google EEUU, etc, son claros ejemplos de inteligencia laboral bien aplicada, porque dónde hay un equipo bien conjuntado y motivado, hay un eficaz desarrollo; en su contra, donde hay carencia de incentivos y malestar, no puede haber crecimiento positivo. Como lei hace poco en la prensa, “en España se entra a trabajar a la hora que Dios manda y se sale cuando Dios quiere”. Con esta manera de pensar los españoles dificilmente llegaremos a alguna parte interesante.
A diferencia de otros paises con mejores rendimientos de todo tipo, en España todavia impera la filosofía del miedo, a la represalia, al expediente, a la incomprensión y al despido; con eso tienen atados a los trabajadores, hecho que no pasa en otros paises donde la gente se atreve a cuestionar las deficiencias de cualquier cosa; sin embargo, poco a poco, el clásico “ordeno y mando” va cayendo, cada vez más, en picado, sólo las empresas más ineptas mantienen todavía estructuras laborales ya obsoletas.
Eric Maskin, premio Nobel de Economía 2007, dijo hace poco que “incentivar a la gente es mucho más eficaz que ordenar o prohibir”. A pesar de ello las condiciones laborales en España son tan lamentables que parecen mas las de los tiempos de la esclavitud que de la modernidad. Son, a fecha de hoy, el cuarto problema más grave que sufre el país. Quizás muchos empresarios deberían replantearse su función en las empresas y hacerse revisar sus huecas cabezas o simplemente dejar que otras manejaran de manera más eficaz la flota empresarial de la nación.
La motivación, pues, debe formar parte de nuestras vidas, en todas sus etapas, incluso en lo más personal ya que sin ella todo carece de sentido. Los déficits de motivación pueden ser la consecuencia de diversas causas, la falta de interés por la actividad, la falta de autoconfianza en los propios recursos, estados de insatisfacción, el impacto emocional de experiencias adversas, alta exigencia, alteraciones psicopatológicas, etc. Todo ello es solucionable si creemos en nosotros mismos.
Uno mismo puede motivarse por si mismo pero también mediante la observación a personas que han alcanzado el éxito. En este caso se puede presenciar los sucesos positivos de las personas que nos han servido de ejemplo. Si ellos pueden yo también puedo! nuestro enfoque para manejar la desmotivación nos distinguirán de los demás. La pregunta es: ¿Por qué la desmotivación ataca a tantos de nosotros? Quizás la respuesta está en la forma que aprendemos a vivir, a sentir, a ser. Mientras seamos como somos nunca alcanzaremos superarnos a nosotros mismos y menos mejorar esta puta sociedad. Recuerdo las palabras que una vez dijo la madre de Facundo Cabral al presidente Alfonsín al salir ésta de un concierto de su hijo; cuando Alfonsín le preguntó si había algo que pudiese hacer por ella, la madre de Facundo contestó: "Señor presidente, con que no me joda, es suficiente".
Aprendamos simplemente a no joder a los demás y viviremos con mayor motivación. Evitemos que esa enorme roca llamada "desmotivación" venza nuestra fuerza y termine por aplastar nuestro esfuerzo por vivir
Saludos,
KarlFM.-