¿Alguna vez has soñado con tener una máquina así
entre tus piernas? Probablemente es el sueño de muchos amantes de las emociones
fuertes aunque a veces sean simples ilusiones. Las motos son bestias que rugen
que libertad y transgresión, erótica y fusión con los elementos esenciales:
espacio, tiempo, tierra, aire. Son ruedas que invitan a cruzar los límites de
la realidad y adentrarse en otro universo lleno de sensaciones indescriptibles.
Conducir cualquiera de estas herramientas es como
volar sin cánones, descubrir el mundo desde otra perspectiva, una dimensión
donde el trazado del asfalto se impregna fiel hasta el fin de tus días. Son
motos que vibran diferente, ajustadas a tu personalidad, o simplemente bólidos
que parecen sacadas del mundo fantástico de Tron, de las tierras indomables de
Dune, de los barrios más Hardcore o del inframundo oscuro de las Crónicas
Vampíricas. Son entidades de metal que erectan el cuerpo a velocidad terminal.
Sean lo que sean, estas motos son un estandarte, una
hiperdimensión de uno mismo que te elevan más allá de los sueños. Imaginación, ingeniería,
mecánica, diseño, estética, se dan cita al mismo tiempo en mentes capaces de
generar motos imposibles, ajenas al circuito comercial masivo. Son motos de
ensueño cuyos fabricantes son ingeniosos locos de las dos ruedas. Apretar el
botón de encendido y escuchar el rugido de las bestias, las autorutas del mundo
os esperan.
KarlFM.-
