Cuando se aprende a ver las diferencias que hay entre lo que debe ser y lo que realmente es, cuando se aprende a ver el abismo existente entre la sociedad teórica y la sociedad real, cuando se comprende que cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia, es que entonces se ha llegado a un punto realmente crítico y una pregunta compleja salta a la vista: ¿para qué coño sirve este mundo y qué debe hacerse en él?Podrian darse muchas explicaciones en torno a este interrogante pero de todas ellas sacaríamos casi siempre una variable constante y es que el mundo ya no es lo que era, ese lugar genial donde uno podia realizar sus sueños. Esa filosofia romántica de la vida, donde los ideales sobrevolaban la cabeza y las buenas intenciones nos rodeaban a cada esquina, se acabó. Ahora cada vez es mas dificil vivir en este mundo, un orbe recubierto de rejas transparentes en cuyo seno habita una dependencia practicamente invisible. Por decirlo de una manera mas directa, nos tienen cogidos por las mismisimas pelotas y cada vez nos las aprietan mas fuertemente. Pero lo peor del caso es, que además, soportamos el dolor e incluso nos gusta.
Todas aquellas cosas maravillososas que, en épocas anteriores, se consiguieron a base de esfuerzos y luchas, ilusiones e ideas, están siendo aniquiladas hoy en dia por la despiadada y salvaje acción del pensamiento único y la rentabilidad máxima. Todo aquello que huele a socialismos humanistas debe quedar suprimido. Suponen un peligro para los fines del Poder. La Humanidad es contemplada, pues, como una gigantesca granja que sirve de sustento para que unos pocos vivan como amos y puedan hilvanar los complejos tejidos del mundo.
Seamos críticos entonces. Dejemos de creer en lo que nos dicen y reflexionemos un poco sobre nuestro mundo, algo que cada vez cuesta más debido al constante bombardeo de idiotez por el que estamos siendo conducidos. Antes de tragar analizar los alimentos que nos dan como platos exquisitos, dejemos de tragar y saboreemos más las comidas de coco, quizás notemos muchas espinas que convendría sacar. Analicemos pues el sistema de vida que nos envuelve y observaremos que los seres humanos se han convertido en simples tornillos y piezas que sujetan el engranaje de un sistema cada vez más depurado e inteligente, un sistema que solo trabaja con el fin de conseguir sus beneficios, sin importarle los medios ni la parte humana de las personas.
Para que este complejo motor funcione sin interrupciones, sin amenazas, sin miedo a perder el control, las cabezas pensantes del mismo controlan para sí dos herramientas importantes: el Dinero, como tentadora arma de control e hipoteca de las personas y paises, y el control de la Información, como medio de manipular la realidad a conveniencia para evitar asi que ésta influya o genere conciencias críticas. Si a esto le sumamos la estrategia de la Globalización, la vida y futuro de los seres humanos está sentenciada de antemano. Todos somos pues víctimas sociales del “power system” globalizador.
Cuan triste es ver que el mundo se está transformando en algo cruel, peligroso incluso, en ver como 2000 años de Historia se dilapidan por la carencia de reacciónes, viendo que la gran mayoria social se está convirtiendo en esa sociedad hormiguera donde todo está perfectamente trazado, viendo como las visiones futuristas de Orwell, Huxley, Clarke, Asimov y muchos mas, se están convirtiendo en una realidad cada vez más cercana y asfixiante. Cuan desalentador es ver estos panoramas sobre todos nosotros.
Cuan triste es ver como la gente prefiere sentarse ante los televisores y meterse dentro de la cabeza toda esa ideología basura que se emite, ver que la mayoría de la juventud ha perdido la capacidad de rebelión, ver que los ciudadanos acatan las cosas sin rechistar, ver como los poderes y responsabilidades crecen y las libertades menguan, ver que la gente enloquece con aparatitos tecnológicos y muestran indiferencia ante la amenaza climática, ver que las mentiras del bienestar, el consumismo descerebrado, la comodidad sin limites y artificiosa, los problemas laborales, la prepotencia de las empresas, el pasotismo de los gobiernos, las subidas de precios, la inutilidad de los sistemas educativos, las corrupciones de alto nivel, el creciente poder y riqueza de los bancos y las multinacionales, y un largo etecetera de vergüenzas humanas, abusos, injusticias, incoherencias y toda clase de adjetivos que prefiero callar. Cuan triste es ver como los sindicatos obreros han abandonado la bandera del trabajador y han vendido su alma al diablo a cambio de verticalizar su horizontalidad y doblegarse a las subvenciones del Estado y a los intereses de las Patronales; cuan desesperanzador es ver la practicamente inesxistente capacidad de de resistencia frente a todo eso. Como alguien una vez: la Humanidad es una verguenza cósmica, un desliz en la creación; si eso es ser humano, es prefereible ser cualquier otra cosa, un chimpancé, por ejemplo, ya que al menos la única preocupación será follar para preservar la manada y comer bananas para sobrevivir. Urge reflexionar, pues, algo que parece estar fuera de moda, urge romper las cadenas, dejar de sentir miedo y hacer frente a a la realidad, debemos generar nuevas voces y conciencias y despertar las diosas de los cambios. Quizás sea el momento de dejar de dormir y vapulear al Poder; quizás ha llegado el instante de dejar la comodidad de que piensen los de arriba e invetir las tortillas, quizás ha llegao el momento de permitir los relevos de sexos y que el Poder esté en manos de las mujeres; quizás entonces el mundo vuelva a sonreir.
Si no somos capaces de reflexionar sobre todo esto, no seremos nunca capaces de vivir y si no somos capaces de vivir no merecemos estar en este Planeta. Dicen que nos expulsaron del Paraíso por tontos, que vivimos en el Infierno por malos y que terminaremos en Polvo sin lograr ser buenos. Somos realmente tan inteligentes como nos creemos?
Dejemos ya de involucionar? Nacimos para hacer cosas, hagamóslas y seamos dignos de ser "humanos".
KarlFM.-
