Aprovechando una década de investigación de archivos y entrevistas en los terrenos de Ucrania, Rusia y Bielorrusia, Kate Brown revela en este libro toda la amplitud de la devastación y el encubrimiento de las consecuencias reales del desastre que se derivaron de la explosión del reactor de la central nuclear Vladímir Ilich Lenin, en Chernóbil. Sus hallazgos dejan claro el impacto irreversible de la radioactividad generada por la mano del ser humano en cada ser vivo; y de manera inquietante, nos obligan a enfrentar el legado incalculable de décadas de pruebas de armas y otros incidentes nucleares, y el hecho de que estamos emergiendo en un futuro para el cual aún no se ha escrito el manual de supervivencia.
Kate Brown es profesora de Ciencia, Tecnología y Sociedad en el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), y ganadora del célebre Premio George Louis Beer de la Asociación Histórica de Estados Unidos. En 2015, recibió el Premio de los Regentes de la Universidad de Maryland a la Excelencia en Investigación. En 2017 recibió el Premio de la Academia Americana en Berlín. Es editora consultora de la American Historical Review y trabaja como editora principal de International Labor and Working Class History. Ha publicado artículos en American Historical Review, Chronicle of Higher Education, Kritika, Aeon Magazine, Slate y Times Literary Supplement. Por si parece poco, ha recibido además numerosos premios por sus libros:
A
Biography of No Place: from Ethnic Borderland to Soviet Heartland (2004).
Plutopia: Nuclear Families in Atomic Cities and the Great
Soviet and American Plutonium Disasters (2013), que fue galardonado
con el Premio Albert J. Beveridge, el Premio John H. Dunning
de la Asociación Histórica de Estados Unidos, el Premio George
Perkins Marsh de la Sociedad Americana para la Historia del Medio
Ambiente, el Premio Ellis W. Hawley de la Organización de
Historiadores Americanos, y el Premio Robert G. Athearn de la Asociación
de Historia Occidental.
Dispatches from Dystopia: Histories of Places not yet
Forgotten (2015), seleccionado en la lista de «Los mejores libros
que leer en 2016» de Atlantic Monthly.
Manual para la Supervivencia, cuya portada ya sobrecoge con tan solo verla, aborda el accidente de Chernobyl desde una perspectiva científica y política. Desde el lado científico el libro analiza los factores que intervinieron en el desastre, haciendo especial hincapié en la contaminación de la tierra, del aire, de los alimentos y de las personas. Políticamente hablando, desmantela la propaganda engañosa de los gobiernos ucranianos e implicados que siempre trataron de subestimar los hechos y las consecuencias de la catástrofe nuclear. Organizaciones internacionales como Cruz Roja o Greenpeace, que trataron de ayudar a las víctimas, se vieron bloqueadas por unas circunstancias políticas post soviéticas que no entendían.
Diplomáticos internacionales y científicos aliados con la industria nuclear evadían o negaban el hecho de que se estaba produciendo un desastre de salud pública a gran escala causado por la exposición a la radiación. Oficialmente el número oficial de muertos osciló entre 31 y 54 personas, pero en realidad la radiación causó entre 35.000 y 150.000 muertes en Ucrania. Ningún estudio internacional midió bien el daño, lo que ocasionó que décadas después, los líderes japoneses repitieran muchos de los mismos errores tras el desastre nuclear de Fukushima en 2011.
Los hallazgos de Kate Brown dejan claro el impacto irreversible de la radioactividad generada por la mano del ser humano en cada ser vivo; y de manera inquietante, nos obligan a enfrentar el legado incalculable de décadas de pruebas de armas y otros incidentes nucleares, y el hecho de que estamos emergiendo en un futuro para el cual aún no se ha escrito el manual de supervivencia.